Acabo de llegar del mercadillo que ponen al lado de mi casa, y me reafirmo en que no soporto esas camisetas con mensajes estupidos que están tan de moda ahora. Un par de ejemplos:
- ¡Olvidalo! No podrías mantenerme.
- ¿Qué parte de NO no entiendes?
Las veo, y me entran ganas de decirle a la portadora: "Pero a ver, gilipollas, quién te ha dicho a tí que yo quiero algo contigo?"
Pero ojo, que también está la versión masculina del asunto:
- Bonitas piernas. ¿A qué hora abren?
- Dime con quién andas... Y si está buena me la mandas.
De verdad que tiene que estar uno muy mal de autoestima para llevar puestas esas cosas.
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